DIARIO EL LIDER (CHILE)

sorprendente historia de Steve Fatow, el pastor cristiano que hace milagros Hace poco más de un año 14 personas recuperaron la visión en una ceremonia en la ciudad de San Juan, Argentina */Carlos Rodríguez Ilabaca/* *La historia* de Steve Fatow, el líder del movimiento cristiano Misión Internacional, es sencillamente sorprendente. Sus cercanos aseguran que tiene el poder de hacer milagros, especialmente con los enfermos. Según cuentan, son cientos los ciudadanos del mundo que pueden dar fe de los prodigios ocurridos durante las ceremonias realizadas por este ciudadano estadounidense de 60 años. Fatow arribó ayer por primera vez a San Antonio para participar en la jornada de restauración de la familia y la juventud "Te bendecimos San Antonio", un evento ecuménico y artístico que comenzó anoche y que se extenderá hasta mañana frente al edificio de la Municipalidad de San Antonio. El mensaje del líder del movimiento espiritual está programado para la noche del domingo, en el cierre de este encuentro en el que actuarán distintas bandas de Latinoamérica y al que están invitados todos los cristianos de la provincia de San Antonio. Durante ese mensaje podrían producirse los milagros de los que hablan sus cercanos, tal como ocurrió hace poco más de un año en la ciudad de San Juan, Argentina, donde 14 personas recuperaron la visión en un acto similar al que tendrá lugar en San Antonio (ver nota inferior). Durante una conferencia ofrecida ayer en la Municipalidad de San Antonio, Fatow, a través de su intérprete, contó parte de la historia que lo transformó en el líder de esta organización evangélica y en objeto de devoción y admiración por parte de los fieles de su iglesia. *REVELACION DIVINA* Según su propio testimonio, tenía apenas cuatro años cuando el Señor se le reveló y lo llamó a predicar en su ministerio. Pero en aquel entonces no entendió el llamado. Sí lo hizo 18 años después, cuando decidió dedicar su vida entera a Dios. La determinación provocó un terremoto en su familia, descendiente de judíos. Sus padres lo echaron de la casa y le dijeron "no vuelvas nunca más". Pero Fatow no echó pie atrás. Al poco tiempo de comenzar a predicar vio los primeros milagros. "Mis padres volvieron a mí y hoy toda mi familia se convirtió a Jesucristo", relata Fatow, sentado al lado del alcalde Omar Vera. El pastor norteamericano, quien en 1976 asumió la presidencia de Misión Internacional, aclara que no es él quien realiza los milagros, sino el propio Señor. "Todo lo que Dios hace en nuestros encuentros tiene un aspecto sobrenatural, porque él es totalmente diferente a lo que nosotros pensamos como humanos. Para Dios hacer milagros es muy fácil, porque es parte de su naturaleza". *SANACION DE ENFERMOS* Fatow asegura que los milagros se producen en todos los encuentros que organizan a través de los cinco continentes y los mayores beneficiados son los enfermos. "El Señor es capaz de sanar a la gente que viene herida, a los desesperados o a los enfermos que no pueden recuperarse de sus dolencias", plantea, aunque, respecto al encuentro en San Antonio, advierte que "no sabemos exactamente quién va a ser sanado en ese momento, pero sí en cada reunión nosotros vemos gente milagrosamente sanada, desde pequeños niños hasta gente de mucha edad". "Los milagros no tienen nada que ver conmigo. Yo estoy tan sorprendido como cualquiera que ve estos milagros. Jesús en la Biblia es llamado el Gran Sanador. El ama tocar a la gente y cambiar sus vidas. El ama mostrar su poder. Por eso es que hemos estado orando respecto a este puerto de San Antonio, para que la gente vea el poder de Dios", confiesa. *Milagros en san Antonio* A su juicio, los milagros se producen "para que la gente vea que realmente hay un Dios, porque Dios sí existe. Y Jesús quiere ayudar a la gente y mostrar su misericordia, su perdón, su amor. Esperamos ver estos milagros en San Antonio, porque han ocurrido en cada ciudad en la que estamos". Casado hace 36 años y padre de dos hijos, el pastor insiste en que "yo no soy el sanador, Jesús es el sanador. Estamos para adorarlo a él. Por eso estamos aquí en San Antonio". Antes de concluir su relato, recalca que en este tipo de ceremonias no se aceptan ofrendas de ningún tipo y que, de producirse algún milagro, es absolutamente gratuito. "Nosotros estamos aquí solamente para agradar y amar a Dios"